Exhibición

"Mascarada Tradicional Costarricense"

04 al 31 de octubre 2013

La exhibición "Mascarada Tradicional Costarricense"reúne las obras creadas por veinticinco mascareros nacionales, que participaron en el Certamen "Nuestras Artesanías Tradicionales" 2013, convocado por el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura y Juventud.  El 31 de octubre se anunciarán los ganadores, en el marco del Día de la Mascarada Tradicional Costarricense.

El propósito de la exhibición es acercar al público a los creadores, por medio de sus obras, -confeccionadas en la técnica tradicional- visibilizarlos como portadores de cultura, y coadyuvar así en la identificación y preservación de este patrimonio cultural.

Encontrará obras de artesanos identificados con las escuelas de "don Lito Valerín", de la provincia de Cartago, el primer mascarero (Giselle Chang, "Mascaras, mascaradas y mascareros) de don Pedro Arias, de Escazú, y don Carlos Salas de Barva de Heredia.  Estos provienen Barva, Flores, Aserrí, Escazú, Desamparados, La Unión, Oreamuno y  Paraíso de Cartago, y Palmares de Alajuela.  Asimismo obras de mascareros de Guanacaste, Puntarenas y Limón, comunidades que sin ser cuna de mascareros, tienen sus creadores, quienes en su mayoría iniciaron su quehacer, "aprendiendo-haciendo", pero influenciados de la tradición mascarera que se origina en el Valle Central.  Todos los participantes, agregan en cada máscara, una práctica, creatividad, ingenia, pasión y  esfuerzo.

Podrá apreciar y disfrutar de máscaras confeccionadas por artesanos con más de veinticinco años de experiencia (Maestros), diez años y más (Artífices) y Aprendices (mínimo de 5 años).

Como actividad festiva (Tosatti: Alejandro) la mascarada tradicional se originan en el Valle Central, en las fiestas patronales, que al son de las bombetas anunciaban las fiestas.   Hoy estos desfiles, han tomado auge en las fiestas privadas, convocan a niños, jóvenes, adultos y más grandes, al disfrute, al son de la música de la jota, la parrandera y otros ritmos.  Un medio para la preservación y conservación de nuestras identidades locales.

La mascarada genera en quienes las confeccionan, bailan, y disfrutan en los desfiles ("bailes de payasos o mantudos"), múltiples sensaciones: asombro, miedo, espanto, alegría, curiosidad, disgusto, y muchas cosas más, que se reflejan en los rostros de niños, jóvenes, adultos y mayores.

La mascarada se compone de dos Gigantes, que son las figuras centrales, dos o tres cabezones o jupones y las máscaras de casco o caretas.  En estos dos casos, las cuales tienen como personajes a la bruja, la calavera o "Muerte", el diablo, el cadejos, la segua, entre otros, el policía, entre otros.

El Centro de Patrimonio Cultural agradece en forma especial a los artesanos mascareros, quienes aceptaron la invitación y participaron, pusieron esmero, dedicación y mucha energía a sus obras.  Este quehacer cultural permite mantener las tradiciones e identidades locales de nuestro país.